A lo largo de los más de treinta años de existencia del tapón sintético específico para botellas de vino, ha ido ganando cada vez más mercado como alternativa al corcho natural. Aunque la entrada fue paulatina, quizás por timidez de los productores pues se considera el sector del vino como muy conservador, aunque no lo es tanto como parece.
Solo hay que prestar atención a algunos datos de consumo. Uno de los más relevantes es que una gran parte del vino que se produce se consume en el mismo año de su embotellado, y son precisamente estos vinos los que más se benefician de los tapones sintéticos. Y es que no es fácil elegir el tapón perfecto para una botella de vino.
Por otro lado, existen otros envases menos tradicionales, como el Tetra Brik, que representan un buen porcentaje de las ventas, a pesar de que no son los más valorados. Esto demuestra que este sector es más amplio de lo que parece, y que las alternativas al corcho cuentan con un amplio margen de maniobra.
Evolución de los tapones en la industria del vino
Aunque la historia del vino es milenaria, la del vino embotellado con corcho es más moderna. Todo comenzó cuando se empezó a utilizar la botella de vidrio como envase, en el siglo XVIII. Lo siguiente fue encontrar una forma de sellarlas para que conservaran el vino en su interior durante mucho tiempo sin que se estropeara.
La solución la teníamos en España y Portugal, países que albergan la mayoría de los alcornoques del mundo.
Tapón de corcho
Extraído de la corteza del alcornoque, el corcho ha sido el material tradicional para tapar botellas de vino durante siglos. Este material natural ofrece propiedades únicas para preservar y realzar los matices del vino que se guarda durante varios años.
Sin embargo, con el paso del tiempo han surgido algunos inconvenientes con su uso, como la contaminación con TCA que provoca el “sabor a corcho” en los vinos y un porcentaje de botellas que “salen malas” en cada lote.
Tapón sintético de elastómero
Los avances en materiales de las últimas décadas del siglo XX y su continua mejora a lo largo del siglo XXI han permitido desarrollar alternativas sintéticas al corcho, como los tapones de polímeros elastómeros.
Estos tapones simulan las cualidades del corcho natural al tiempo que ofrecen una mayor consistencia en el tamaño, neutralidad de sabores y un sellado fiable.
Los tapones fabricados con elastómeros se han abierto camino en la industria vinícola gracias a sus propiedades y a un precio considerablemente inferior al del corcho. También ha llamado la atención de muchos productores el hecho de que eliminen el problema de la contaminación por TCA antes mencionada.
Beneficios del tapón sintético para la conservación del vino
Los nuevos modelos de tapones para botellas de vino sintéticos han alcanzado un alto nivel de perfección técnica y tienen muchos beneficios para la conservación del vino embotellado:
- Al fabricarse en moldes, la precisión de sus proporciones es muy alta y proporcionan un buen sellado.
- Se fabrican con un material neutro que no interactúa con el vino, es decir, no altera su sabor ni su olor.
- Ofrecen una gran durabilidad, algunos modelos alcanzan los 48 meses sin degradarse.
- Son totalmente impermeables y garantizan un cierre hermético.
- Poseen un alto nivel de higiene y limpieza al no atraer moho ni contaminantes.
- Son sostenibles, se fabrican con materiales reciclables y algunos incluso son biodegradables.
- Se pueden personalizar los tapones con marcas y diseños personalizados.
- Ofrecen alta calidad a precio reducido.
Estas ventajas hacen que sean ideales para conservar y almacenar todo tipo de vinos, especialmente los jóvenes, desde tintos y rosados hasta espumosos y blancos. Su uso garantiza que el vino mantenga intacto su sabor y cualidades durante un largo periodo.
Sostenibilidad y tapón sintético
Los tapones sintéticos son totalmente reutilizables. Se fabrican con plásticos de última generación y, como tales, son 100% reciclables.
Además, también se producen modelos más ecológicos que utilizan bioplásticos, fabricados con polímeros vegetales.
Para conservar las botellas tapadas con tapón sintético es recomendable seguir unas sencillas recomendaciones:
- Al contrario que las botellas con tapón de corcho, que se almacenan en horizontal para mantenerlo húmedo, las de tapón sintético se guardan mejor en vertical.
- Conservarlas en un lugar fresco, oscuro y sin vibraciones. La bodega es el sitio ideal.
- Revisar el nivel de llenado y la integridad del tapón periódicamente.
- No almacenar durante períodos más largos de tres años.
Preguntas frecuentes sobre el tapón sintético
¿Son mejores los tapones sintéticos que los de corcho?
Depende. Para vinos jóvenes y espumosos los tapones sintéticos aportan consistencia y neutralidad. Pero muchos puristas del vino aún prefieren la tradición del corcho natural en los vinos de reserva.
¿Puedo reutilizar tapones sintéticos?
No es recomendable, ya que pierden sus propiedades de sellado. Lo ideal es usar tapones nuevos para cada botella.
¿Sirven los tapones sintéticos para embotellar vinagre o aceite?
Sí, son perfectos para conservar vinagre, aceite y otros productos.
En Excellent Cork somos fabricantes de tapones sintéticos para botellas de todo tipo de vinos. No dudes en consultarnos si tienes una bodega y quieres usar nuestros tapones.